La verdad sobre la peluquería canina

Formación

No hay una formación reglada con título oficial con validez europea como cualquier FP.
La formación actual es de pago, existiendo todo tipo de formadores, desde los más mediocres enseñando una peluquería de baja calidad y un trabajo que se aleja mucho de lo correcto para la salud del animal y de lo que marca la estética, hasta profesionales de verdad que imparten clases de perfeccionamiento especializadas.
Formación de alto coste.
Escuelas multicursos intentan lucrarse de la ignorancia del alumno ofreciendo varios cursos con más horas teóricas que prácticas y un número de horas prácticas que no son las necesarias para poder desempeñar la profesión.
Existen cursos totalmente a distancia sin prácticas.

La mayoría de puestos se desempeñan en clínicas veterinarias.
La mayoría de las clínicas veterinarias no hacen contratos de trabajo y negocian un porcentaje por perro, normalmente un 60% poniendo el peluquero su propio material, aunque se ven condiciones mucho peores.
Algunas clínicas veterinarias incluso no quieren facturas por parte del peluquero, puesto que no tienen declarada la peluquería, por lo que el peluquero trabaja en negro.

En clínicas veterinarias/tiendas de venta de mascotas, la peluquería suele ser una habitación de como mínimo de ancho lo que mida la bañera y de largo lo que de el ancho de la puerta, y como máximo, lo que le sobre después de haber diseñado su proyecto.
No suelen tener ningún tipo de ventilación ni climatización.
Suele ser el lugar de cuarentena para animales enfermos.
Si el establecimiento se encarga de facilitar el champú, suele ser lo más barato o incluso fairy o lo primero que encuentren en el súper de enfrente.
El peluquero no es peluquero, es el que pela a los perros. No tiene voz ni voto porque el veterinario o el dueño de la tienda de animales sabe más, y es el que decide qué cobrar al cliente aunque no sepa el trabajo que ha dado el servicio realizado.
Nos obligan a hacer un número de perros diario siendo en muchas ocasiones inviable y perjudicial para los perros. Otro ejemplo más para demostrar lo poco que saben sobre peluquería el que está por encima nuestra, que ni nos hace un mísero contrato por unas horas.

Es una profesión de riesgo, expuestos a mordeduras y ataques, transmisión de enfermedades y/o lesiones óseas y musculares por los esfuerzos de cargar con los perros y pasar muchas horas de pie.
En caso de ocurrir un accidente:
- No nos corresponde baja laboral ni retribución al estar sin contrato
- A los autónomos no nos corresponde una baja laboral digna
Maternidad:
- No es considerada en muchas comunidades una profesión de riesgo porque no está ni catalogada como profesión, por lo que tenemos que aguantar trabajando hasta el mismo día del parto, cargando peso (algo totalmente contraindicado en embarazadas), expuestas a enfermedades como la toxoplasmosis, etc. por lo tanto la baja prematura no es motivo para percibir la retribución del 100%.
- Una vez nacido el bebé, no tenemos ayudas para las madres emprendedoras que necesitan compaginar la maternidad y el negocio, un negocio que consiste en trabajo manual, que requiere 100 % dedicación, y no se puede dejar desatendido.

Se hace muy difícil montar una peluquería canina cuando es una actividad que no existe por ningún sitio.
Nuestro epígrafe en hacienda es 979.4 Adiestramiento y otros cuidados animales, o el 899, según la administración con la que des. Son dos epígrafes totalmente diferentes, perteneciendo uno a una actividad empresarial y otro a una actividad profesional, teniendo esta última unos beneficios fiscales durante los dos primeros años.
Si decides montar tu peluquería por tu cuenta, como ya eres autónomo desde hace unos años, no te puedes beneficiar de las ayudas al emprendedor.
No existen unos requisitos claros para montar una peluquería canina. Se mencionan clínicas y tiendas de venta de animales, pero peluquerías caninas a secas no.

Debido a la falta de formación de calidad, nos encontramos con peluqueros que realizan trabajos mediocres e incluso muy perjudiciales. Para poder competir contra la peluquería de calidad tiene que hacerlo bajando los precios a niveles insostenibles para una peluquería de calidad.
Éstos suelen ser personas que no pagan impuestos, ya que el bajo coste de sus servicios no compensa los gastos que requiere ser autónomo y pagar el irpf y el iva.

Queremos una formación reglada, que se considere un FP más, con un título oficial.
Queremos eliminar la formación a distancia y proponer una formación con un mínimo de 200 h prácticas para cursos básicos y mínimo 40 h para especialidades.
Es necesario incorporar conocimientos de morfología, dermocosmética, etología y primeros auxilios.
Queremos un epígrafe en hacienda, queremos tener nombre como profesión.
Queremos un colegio o similar para:
- Fijar los precios base oficiales y así acabar con la guerra de precios que tanto daño hacen a los emprendedores.
- Establecer unos requisitos y condiciones laborales mínimas, de seguridad, salud y bienestar del peluquero y del perro, así como sobre la creación de peluquerías caninas.
- Fijar unas condiciones salariales mínimas.
- Llevar un registro de los profesionales para así inhabilitar a aquel que sea juzgado por algún episodio de maltrato animal, dentro o fuera del trabajo.
- Crear un temario oficial.
- Crear diferentes categorías profesionales.
- Hacer campañas de concienciación y enseñar a valorar nuestro trabajo por lo que es y no por el precio.